lunes, 22 de agosto de 2016

Primer día sola con los niños!

Hola a todos!

Bueno, como bien leéis en el título, llego el día... y es que hoy he pasado mi primer día sola con los niños. Y lo que todo el mundo me pregunta, ¿qué tal? Pues como oigo mucho que se dice por aquí... SO HARD! O lo que es lo mismo... muy muy muy muy complicado/duro.

Antes de contaros, os recuerdo que mi familia está compuesta por un padre y una madre (en proceso de divorcio) y tres niños, dos niñas mellizas de 6 años y un niño de 8.

Como ya dije en post anteriores, ya sabía que con el niño lo iba a tener un poquito más complicado (aunque ya os adelanto que no pensé que tanto), mientras que con las niñas iba a ser "coser y cantar" (uso las comillas porque tendrán sus días malos como todos los niños, pero en principio son toooodo amor), pues tal y como pensaba así ha sido.

Mi día de trabajo empezó a las 7.30 que fue cuando me recogió la madre (porque aún no tenían listo el seguro del coche, por lo que aún no podía conducir). Me llevó a su casa (que como sabéis ya conocía) y me enseñó donde había dejado preparado el lunch y que dar de comer a cada uno de los niños en base a sus preferencias en cada momento del día (y es que aquí los niños, o al menos los míos, desayunan (sobre las 7), toman media mañana (sobre las 10), comen el lunch (sobre las 12), meriendan (sobre las 3) y cenan (sobre las 6); y como para mi las cosas son complejas, cada uno de mis niños come una cosa diferente en cada momento del día, y a esto sumamos que siguen la dieta kosher, un lío vamos). Después la mamá se fue a trabajar y me dejó sola con los tres niños.

El principio de la mañana muy bien, la verdad es que todo fue sobre ruedas, estuvimos jugando juntos, leyendo y pasando un buen rato. Llegamos a la hora de la media mañana sin problema, preparé algo para cada uno de ellos y hasta ahí todo bien... No se como ni por que, las cosas empezaron a no ir tan bien a partir de ahí. Como ya he dicho anteriormente mis niñas son un amor, y para lo pequeñas que son he decir que se han portado como verdaderas campeonas hoy, me han ayudado muchísimo en todo, y la verdad es que se lo agradeceré eternamente...

Todos los problemas han venido con mi niño mayor (de 8 años), ha empezado a decidir retarme (eso entra dentro de lo normal, ya sabía que pasaría, son niños y necesitan saber hasta donde te pueden llevar), pero ha decidido retarme hasta límites insospechados. Lo primero, es que a cada cosa que le pedía contestaba sistemáticamente no, cada vez que le decía que no hiciera algo él lo hacía, si le decía que parase de hacer algo seguía haciéndolo (como lanzar cosas a sus hermanas, por ejemplo)... y todo esto acompañado de risas mientras me miraba queriendo decir, no te hago ni puto caso y me la pela. Bueno, vale, empecemos a usar todo aquello que tan bien se me da y que tanto me ha servido en otras ocasiones (como el tiempo fuera, dejarlo solo, intentar razonar...), pero nada. IMPOSIBLE con él. Vale, no me desespero, no desisto.

Llega la hora del lunch, les pido que recojan sus cosas e intento "hacer las paces con el niño", les prometo una galleta si dejan todo bien recogido. Las niñas lo hacen sin rechistar (a pesar de que el niño no dejaba de pincharlas y retarlas, vamos, que no paraba molestar a mis probrecillas) pero el niño, aún ofreciendo mi ayuda para recoger, decide que se la pela y que va a seguir haciendo lo que le salga de la punta, pues vale, no pasa nada, se queda sin galleta y listo.

Bajamos a comer, terminan el lunch y empiezo a hablar con las niñas sobre si quieren la galleta ya o prefieren esperar... Ahí aparece el niño en acción, diciendo que el quiere la galleta, le digo que lo siento mucho pero que para el no hay galleta, primero porque no ha recogido las cosas, y segundo porque lleva toda la mañana dándome por el... (bien explicadito con mi súper inglés, todas las razones de porque no le doy la galleta).
Nos pasamos como 30 minutos discutiendo sobre la galleta, lágrimas, gritos, enfados y demás y yo que no cambio de idea (ya sabéis que cuando digo algo lo cumplo, en todos los sentidos, pero especialmente cuando trabajo con niños). Mi niño que decide ponerse delante del armario para que no pueda coger las galletas, yo que lo aparto y las cojo. Doy una galleta a cada una de sus hermanas y mi niño que vuelve a lo de antes, gritos, lágrimas, enfados y demás, pero yo que no cambio de idea. Voy a guardar las galletas y mi niño que intenta quitármelas, las pongo en un estante donde no llega y el que intenta subirse a la encimera para cogerlas, yo que lo bajo, me pongo delante de él y le digo que no, que el no tiene galleta, y vuelvo a explicar el porque de mi decisión.
Ahí empieza la hecatombe... si antes habían sido lágrimas, gritos y enfados, ahora se suman puñetazos, patadas, arañazos, insultos, empujones, intentos de mordisco... mira, os juro que nunca me había pasado nada parecido. Pero paciencia, cuando parece que empieza a calmarse empezamos otra vez, puñetazos, patadas, arañazos, insultos, empujones, intentos de mordisco, lanzamiento de objetos, un muy alto I HATE YOU (si, Sandee lo estoy haciendo bien desde el primer día), un no quiero que vuelvas a venir a esta casa y millones de ingeniosas frases más... Después de soportar esta situación durante muchísimo tiempo, creo que hemos podido estar así al menos 45 minutos (con las consiguientes marcas por todo mi cuerpo regaladas por mi niño en ese tiempo) decido llamar a la madre a ver si ella me ayuda a calmarlo, porque yo ya no se que más hacer. La madre consigue calmarlo pidiendo que vaya a su habitación (odio tener que admitir que he necesitado ayuda de la madre, pero cuando no se puede, no se puede y punto, hay que pedir refuerzos, además que como sabéis los 8 años empiezan a salirse de mi rango de edad).
Me quedo sola con las niñas, y os juro que lo he pasado taaaaaaaan mal durante ese rato que se me caían las lágrimas cuando estaba con ellas. Por suerte ya os dije que las niñas han sido un amor, un amor de verdad, me emociono de recordarlo... Durante todo este rato se han mantenido al margen y me han ayudado en todo, M especialmente que a pesar de que su hermano le ha dado un puñetazo horrible en toda la barriga, la pobre mía ha seguido ahí intentando ayudarme, ha ido a comprobar que su hermana estuviera bien (porque en este tiempo la había perdido de vista), ha intentado calmar a su hermano, me ha acercado el teléfono para llamar a su madre, ha explicado la situación a su madre (que yo con intentar que el niño no siguiera pegándome tenía suficiente), un amor de verdad. Luego T, cuando ya se había calmado su hermano y había subido a la habitación, me ha ayudado a limpiar el estropicio que había por el suelo (porque mi niño ha tirado todo lo que había por el medio) sin que se lo pidiera. Ya os digo que un amor, las adoro, de verdad, hoy se han ganado mi amor eterno.

Cuando mi niño ha conseguido calmarse, he de decir que ha venido a jugar con nosotras y lo hemos pasado bastante bien, aunque yo estaba con una tensión horrible, no fuera que volviese a explotar... Finalmente ha llegado la mamá a casa y ha hablado con el niño, esperemos que en el resto de los días las cosas vayan mejorando, porque pasar un año así se me va a hacer difícil. Por suerte, esta semana el niño está de campamento (hasta el viernes) por lo que podré disfrutar de la compañía de mis niñas y creo que pasaremos un muy buen tiempo juntas. Ya os iré contando.

Aún así, desde ya os digo que no pienso rendirme con el niño, aunque me vaya llena de moratones cada día a casa, así que deseadme suerte!

Un beso enorme y os mantendré informados sobre las novedades de mis días con mis queridos host kids, =).


Primeros días en mi nuevo hogar!

Hola a todos!

Me quedé en el último post contando que poníamos rumbo a nuestros nuevos hogares, verdad? Bueno, pues yo puse rumbo en tren a mi nuevo hogar, he de decir que a pesar de tener que recorrer como un millón de vagones con las maletas a cuestas hasta encontrar un sitio libre, el viaje en tren (excepto el detallido del aire acondicionado, para el que ya iba preparada) fue genial, el tren tenía cargadores y además WiFi, así que una 3 horas y media y una intensa conversación vía whatsapp después llegaba a mi destino.
En principio, cuando llegué, mi HD (que era quien me recogía) no estaba esperándome a las puertas de tren (algo que por una parte agradecí, que estaba atacada de los nervios), subí las escaleras y cuando ponía rumbo a la salida, ahí que venía él, muy campechano. Según se acercaba lo oí decir, Leila? y yo como, siiiiii, soy yooo, jajajajajaj. Nos dimos un abrazo y pusimos rumbo a mi nueva casa. El viaje fue de apenas 15 minutos, y estuvo muy bien, no paramos de hablar en todo el camino. La llegada a casa... no fue tan bien, antes de nada, para los que no me conozcáis, deberías saber que yo soy todo orden, me encanta que cada cosa esté en su lugar, y bueno, digamos que cuando entré en la casa, era justo todo lo absolutamente contrario a mi. Oh, oh, que mal así de primeras... Tranquila Leila, no te quedes con la primera impresión, no pasa nada. Subo a la que va a ser mi futura habitación y me veo solo un colchón con un somier, ni sábanas ni toallas, ni nada de nada (yo sabía que estaría semi vacía, pero no me esperaba esto bajo ninguna circunstancia), bajamos a que me siga enseñando la casa y sigo diciendo que es todo lo opuesto a mi (que mal), me da las sábanas y las toallas (recién sacadas de la secadora) y decido que ha llegado el momento de ir a dormir... Mañana será otro día e igual veo las cosas de otra manera, porque por ahora me estoy agobiando.
Os presento mi habitación cuando yo llegué (bueno, esto es a la mañana siguiente que ya tenía sábanas y toallas), jajajaja.



Por suerte el día siguiente (viernes) las cosas mejoraron bastante, me recogió la mamá (dándome la bienvenida con un gran abrazo) con uno de los niños, el mayor, pasamos el día juntos y a última hora recogimos a las niñas, que llegaban de un campamento. Estuvo genial, la verdad y mis impresiones sobre la familia empezaron a cambiar.

El sábado me fui con el papá a comprar cosas para mi habitación (que como bien me dijo Hector cuando le envié la foto, no está muy vacía? jajaja), la verdad es que me dejó comprar todo lo que quise (pagaba él) e incluso me animaba a comprar alguna que otra cosa más. Estuvo genial, llegamos relativamente pronto a casa y nos dedicamos a acabar de poner a punto mi habitación. Aún nos quedan cosas que comprar para mi segunda habitación (iremos el próximo fin de semana), pero en principio mi habitación principal ha quedado así.































Ha quedado chula, verdad?

Después el domingo fue genial también, volvió a recogerme la mamá y nos fuimos al museo de las ciencias que está en Boston, me encantó el sitio, y además como tienen tarjeta de socios creo que llevaré bastante a los niños allí, =). Tras el lunch me acercaron a casa porque mis niñas tenían play date con una de sus amigas del cole y la verdad es que yo estaba cansada. El resto del día lo pasé en casa en modo relax y actualizando el blog (que falta le hacía).

Y hasta aquí mis primeros días con la familia. El primer día de trabajo lo publicaré justo a continuación de esta entrada (ya lo tengo escrito) para que veáis como me fue, =).

Un beso enorme!

domingo, 21 de agosto de 2016

Training!

Hola hola a todos de nuevo!

Como veis estoy sacando un poquito de tiempo para escribir, y es que como ya dije en el post anterior, al fin estoy asentada en Boston, por lo que por las noches tengo un poquito más de tiempo libre (tiempo que dedico a daros las buenas nuevas, se que algunos estáis ansiosos por saber como va todo por aquí).

En este post intentaré hablaros un poco sobre el training, que para los que no lo sepáis son unos días que las au pair pasamos en Nueva York haciendo cursos sobre el cuidado de niños, la cultura americana, y que esperar de nuestro año aquí.
Yo empecé el training un día antes de lo que se suele hacer, volé un domingo y empecé el training un lunes (habitualmente se vuela en lunes y se empieza el training en martes) pero mi familia me pagó el curso teórico de conducir, por lo que adelanté todo un día, =).

Bueno, en el post anterior me quedé en la llegada al hotel del domingo, llegamos a primera hora de la tarde, hicimos el check in en el hotel y nos dieron la llave de nuestra habitación. Y después? Pues después nos quedamos un poco descolocadas, porque no sabíamos muy bien lo que teníamos que hacer... Aunque por suerte nos encontramos con otras au pairs que nos indicaron que una hora, más o menos, teníamos una reunión donde nos explicarían todo. Tras la reunión llegó la hora de la cena (si, cena después de todo lo que habíamos comido en el avión), y que creéis que cenamos las 4 (Bea, Alessia, Fabiola y yo)? Pues típica hamburguesa americana, con sus patatas y todo, jajajaja. Que yo diga que la carne estaba carbonizada (cuando sabéis que me encantan muy hechas) os da una idea de como estaba (Hector, cuando vengas ni se te ocurra pedir carne, porque vas a odiarla...).



Después de eso, bañito en la alberca (como dirían en México), piscina para todos los españoles, y a dormir, que estábamos reventadas después de todo el viaje, =).


El lunes nos despertaron a las 7 de la mañana (y digo nos despertaron porque sonó el teléfono de la habitación), mis compañeras y yo nos cagamos en todo pero tocó salir de la cama (creo que aún no lo dije, mis compañeras de habitación eran una chica brasileña, un amor, y una chica alemana, un poco siesa, que van a vivir cerca mio en Boston). Desayuno típico americano también, cereales, huevos, bacón, fruta, bagels, mantequilla de cacahuete... aunque no había pancakes... =(. Comimos como cerditas y a empezar con el curso de conducir. 

He de decir que el curso de conducir está genial, así que si la familia os ofrece hacerlo no lo rechazéis. La chica que lo da es una cachonda, súper divertida y la verdad es que se la entiende muy muy bien, además hay muchas cosas diferentes en relación a la conducción en España, por lo que es súper útil. Hicimos una pausa para comer y luego seguimos por la tarde. Lo único malo? El problema que tienen los americanos con el p... aire acondicionado, y es que nos tenían congeladas, con deciros que las chicas nórdicas iban con chaqueta de invierno y gorro... Bea y yo hasta nos llevamos una toalla para taparnos las piernas (un frío del demonio, vamos...).
Como terminamos bastante pronto el curso (a las 3.30 exactamente) decidimos irnos a visitar la ciudad de Nueva York. Formamos un grupo curioso, erase una vez tres polacas, dos mejicanas, dos españolas y una italiana, jajajaja. Cogimos un taxi hasta la estación de tren (3$ por persona) y luego un tren hasta Grand Central (20.50$ ida y vuelta). Visitamos un poquito de Times Square, decir que es impresionante se queda corto... Aquí os dejo una foto.



Y después cogimos el metro dirección South Ferry (fue divertido, porque de repente en una de las últimas paradas el metro se paró y se vació casi por completo, vamos que en el metro solo quedábamos los turistas, por suerte un amable señor nos informó que teníamos que ir a la parte de delante del metro, que era la que llegaba a South Ferry, tenías que habernos visto, 8 "guiris" corriendo por la estación hacia no sabíamos muy bien donde, jajajaja), después cogimos el ferry gratuito a Staten Island para poder ver de "cerca" la estatua de la libertad y una preciosa vista de Manhattan. A la vuelta en metro, nos faltaban un dolar en cada tarjeta (si para entrar en el metro de Nueva York necesitas una tarjeta donde pones dinero, nosotras compramos dos para las ocho que íbamos, si, se pueden compartir) por lo que dos de nosotras se quedaron sin poder pasar, por suerte dos amables (muy amables) jóvenes nos dieron sus tarjetas (aún no entiendo muy bien como ni por que, jajajaja).

Os dejo algunas fotos para que disfrutéis de las vistas.



El segundo día de training (martes) fue cuando nos juntamos con el resto de au pairs (unas 200 mujeres juntas en el mismo hotel, una locura, aunque conozco a mas de uno al que le hubiera encantado estar invitado, ;)) este segundo día también fue muy divertido, nos dividieron en dos grupos, por suerte a mi me tocó el grupo de la habitación donde se estaba calentito, jajajajaj, pero en el otro grupo hacía tanto frío como en el curso de conducir del día anterior (aviso a navegantes, ropa de abrigo para el training). La chica que nos tocó era genial, también muy muy divertida y se la entendía muy bien, además hacía una pequeña pausa cada hora, cosa que se agradecía.
Esa tarde hicimos el tour por la ciudad de Nueva York que me había pagado la familia también, he de decir que por lo que cuesta en APIA (80$) no merece la pena, así que si no os lo paga la familia ni os molestéis en hacerlo es preferible que vayáis a vuestra bola. Lo que merece la pena del tour es que subes a "The top of the rock" y la vista desde allí es increíble...


El tercer día de training (miércoles) tuvimos una clase con la cruz roja americana sobre primeros auxilios, la verdad es que me resultó un poco aburridilla, pero creo que es más bien porque yo ya tengo el curso de primeros auxilios hecho, entonces todo lo conocía ya... Esa tarde-noche, acabamos bastante tarde las clases, por lo que decidimos hacer fiesta de pijamas, además era nuestro último día juntas en el hotel. La verdad es que fue genial, hemos formado un grupo chulo durante el training, y nos divertimos mogollón dándole a la sin hueso, tanto que me encontré al de seguridad por el pasillo que venía a ver que estábamos haciendo, jajajaja... 



Y así, llegamos a nuestro último día de training (jueves) día en que cada una de nosotras se iría a conocer a su host family. Esté día la verdad es que fue muy emocionante, aunque parezca una tontería en poco tiempo he hecho grandes amigas, amigas que creo van a ser para toda la vida, =). Ese día estamos todas "so exciting" entre los nervios de conocer a tu familia durante el próximo año y la pena de las despedidas, es un día bastante ajetreado... 
Al principio de la mañana todo sigue la "normalidad" del resto de días, pero uso las comillas porque como ya digo estamos demasiado emocionadas para que todo sea normal. Así que esa mañana, solo hablamos y hablamos y hablamos (just talk and talk and talk) entre nosotras intentando calmar los nervios (recuerdo que Chiara se devoró todas las uñas). Después del lunch sube aún mas la tensión, ya que a las 2 empiezan a llegar algunas familias (las familias de aquellas a las que recogen en el hotel) y a las demás nos empiezan a organizar para que cojamos nuestros respectivos medios de transporte (tren, avión, autobús) hasta donde nos esperan nuestras futuras familias. Todo este ajetreo entre despedidas, besos, abrazos y promesas de volver a vernos...




Bueno chicos, me encantaría seguir, pero es tarde y mañana magrudo... mañana será mi primer día de trabajo oficial (que emoción), así en el próximo post os contaré mis primeros días con la familia.

Mientras un beso enorme y un abrazo.

Poooor cierto, hoy se cumple mi primera semana en suelo estadounidense y ya os digo que está siendo increíble... todo lo que os pueda contar en el blog se queda corto en comparación a la maravilloso que está siendo, =). Estoy feliz y solo quería compartirlo, =)

sábado, 20 de agosto de 2016

Últimos tres días en España y vuelo!

Hola a todos!!

Lo primero que debo decir es... ESTOY EN BOSTON, siiii señoras y señores, damas y caballeros, niños y niñas. Al fin puedo decir que estoy asentada en Boston, pero como eso es lo último que ha pasado y hace 9 días que no escribo voy a contaros los últimos acontecimientos (puede que en más de un post diferente, que hay mucho que contar) en el orden en que ocurrieron (espero no olvidar nada importante).

Empecemos por el principio. Los últimos tres días fueron frenéticos, os voy a contar lo más interesante de cada día (es que no me da tiempo a contarlo todo), =).
El día después de escribir el post fui a intentar cambiar mi dinero en el banco, entro en el banco de mi pueblo, me dirijo a la chica y le digo que me gustaría cambiar euros por dolares americanos, me dice que cuanto, le digo que para tener 100$ y SORPRESA... me contesta que vale, pero que tardarán una semana. Bien, muy bien Leila, no tengo tiempo... me voy en 3 días. Le digo que no me da tiempo y me dice que lo intente en el aeropuerto. Bueno, pues tendré que hacerlo así, aunque me sangren por el cambio o intentar sacar dinero en cuanto llegue a Nueva York, me cueste lo que me cueste. Al final cambié en el aeropuerto (aclaración, en el aeropuerto cambian el dinero sin ningún problema y además no te cobran comisión, así que al final me salió bien, =)).

El día siguiente (viernes) quedé con mis súper exjefes de Italia y mi pollito-el amor de mi vida, estuvimos toda la tarde juntos y me lo pasé genial, si es que los adoro... Cenamos juntos (con toda su familia) y tatatachán, en medio de la cena me escribe mi amigo Tiano para saber si me apetecía tomar algo en su pueblo, a lo que por supuesto contesto que siiii (y es que ya sabéis, salir, beber, el royo de siempre.. quitando las drogas y que no bebo, jajajaja). Fui a casa, me cambié de ropa y lista para salir. La noche fue estupenda, estuve con un montón de grandes amigos con los que me divertí mogollón, solo hubo un problema... me liaron (prometo que no fui yo, fueron ellos los que me liaron) y llegué a casa pasadas las 7 de la mañana... 
Hasta ahí sin problema, no?, excepto que a las 15.30 de ese mismo día salía mi tren dirección a Madrid y, por si no lo recordáis os lo recuerdo, aún tenía la maleta sin hacer. Tuve que tomar decisiones, jajajajaja, y decidí hacer la maleta sin ir a dormir y una vez terminada y realizado el tour de despedidas, acostarme un poquito hasta que diera la hora de ir a coger el tren... Hacer la maleta sin haber dormido? No os lo recomiendo, bajo ningún concepto, me pasé casi toda la mañana intentando no quedarme dormida sobre ella e intentando decidir que era necesario y que era prescindible (porque obviamente no todo lo que había seleccionado me entraba en la maleta). Cuando conseguí terminar la maleta y el tour de despedidas era hora de coger el tren... Mierda, me voy sin dormir, pero no importa, tengo tiempo en el tren (unas tres horas), hasta que va y me toca sentarme detrás de un mocoso que se lleva todo el camino gritando. y oye, no creáis que no me gustan los niños, soy au pair, los adoro, pero... me cago en el, mis tres horas de dormir se convierten en una hora y poco...
Llego a Madrid (con retraso, como no), y nada de dormir, me recoge mi amiga Irene y nos vamos a ver a Irma, tarde de acá para allá, disfrutando de las últimas horas en su compañía. Cenamos fuera e... Irma me lía (fue ella la que me lió, lo juro) para salir a tomar algo. Salimos y cuando conseguimos volver a casa me doy cuenta de que solo tengo unas tres horas para dormir antes de que llegue el momento de ir al aeropuerto. Bien, voy a ir descansadita en el avión, jajajajaja.

Llego al aeropuerto y 15 minutos después aparece Bea (la chica de mi agencia que volaba conmigo, os hablé de ella en el post anterior, un amor de niña), nos dirigimos a la zona de check-in y justo ahí empiezan las cosas raras que ya sabéis que suelen pasarme, jajajajaja. Lo primero es que, estamos esperando en la cola para hacer el check-in, cuando se me acerca un señor de la aerolínea y me pide que lo acompañe... Mi cara? un poema, la de Bea? como la mía. Me pide el pasaporte y me empieza a hacer preguntas. ¿Donde vas? ¿Cuanto tiempo vas? ¿Que vas a hacer? ¿Donde vas a vivir? ¿Dirección de la casa? ¿Cuantos niños son?, un tercer grado vamos. Después del examen, me pone una pegatina en el pasaporte y me pide que espere ahí. Llega el turno de Bea, sigue más o menos el mismo proceso y nos hace esperar... Al fin conseguimos hacer el check-in, aunque no entendemos muy bien que ha sido eso.

Pasamos a la zona de controles y... más cosas raras, bueno conmigo no tanto, el cacheo habitual que ya estoy acostumbrada a que me hagan, y lo raro le sucede a Bea, que le pasan un papelito por el pantalón y le dicen que es para detectar sustancias no permitidas, perdón?? es que tiene cara de traficante o algo? Bueno, el test debe dar negativo porque nos dejan pasar. =)

Después de eso, todo correcto, hasta que llegamos a la zona de embarque (nuestro vuelo ya está embarcando) y me pongo a intentar hacer una foto al típico cartelito de aeropuerto donde se indica el destino del vuelo (pensé que quedaría chulo en el blog), cuando se me acerca (casi corriendo, lo prometo) una azafata para indicarme que no está permitido hacer fotos... joe, que problema tienen los americanos con las fotos?? Intento frustrado, así que subimos al avión.

El vuelo sin mucha novedades, típico americano, comer cada dos horas (juro que fue aproximadamente cada dos horas), primero nos dieron las típicas galletitas saladas con forma de lazo, luego nos trajeron el lunch (a las 12:30 de la mañana más o menos), luego nos dieron un helado y por último la merienda, casi nos toca salir del vuelo rodando, jajajajaja.

Mini Pretzels
Lunch


Heladito
Merienda


También pasaban cada poco tiempo ofreciendo algo de beber, además cuando montamos en el avión nos dieron una almohada y una mantita (cosas que por supuesto usé, porque en el tiempo que no comía me dedicaba a dormir, recordad que las dos últimas noches apenas había dormido). 8 horas y media después aterrizamos en el JFK de Nueva York, ESTOY EN NUEVA YORK.

Ahora tocaba pasar el control de aduanas, rellenas un papel diciendo si tienes algo que declarar (como mucho dinero, o productos que vayas a revender, o algo así), yo no declaré nada, y sobre una hora y media de cola después consigues pasar el control, donde la chica/chico de aduanas te pone el ansiado sello en el pasaporte (siiiiii, tengo mi primer sello en el pasaporte!) tras enseñar también el DS2019 y explicar lo que vas a hacer en el país (que felicidad, es mi primer sello en el pasaporte, =)). Luego vas a recoger el equipaje (por suerte estaban ambas maletas) y vuelves a pasar otro control donde entregas el papel con lo que has declarado y te preguntan de nuevo sobre lo que vas a hacer en EEUU.

Mi primer sello (si, me hace mucha ilusión).

Como ya sabéis, hay una representante de APIA lista para recogeros en el aeropuerto, la nuestra era graciosísima, no paraba de hablar, aunque ninguna la entendíamos nada (ni Bea, ni Alessia, una chica italiana que llegó a la misma vez que nosotras, ni yo) pero ella no paraba de hablar, era muy graciosa, la verdad... Luego fuimos a recoger a una chica mejicana que llegó más o menos a la vez, solo que a otra terminal, Fabiola se llama. Y entonces, pisamos suelo neoyorkino (el del aeropuerto, de la puerta, pero Nueva York al fin y al cabo, jajajaja) menudo bochorno hacía, madre del amor hermoso, eso si era calor... Bienvenidas a Nueva York, =).
El viaje en coche hasta el hotel fue gracioso, me convertí en la traductora oficial italiano-español, español-italiano, además de que nos fueron a buscar en un maxi coche con chófer de traje, estuvo chulo, =).

Y entonces llegamos al hotel, =).

En el siguiente post, intentaré contaros el training y los primeros días con mi host family.

Mientras tanto, os mando un besito enorme y espero podáis leerme pronto, =)

jueves, 11 de agosto de 2016

A tres días!

Buenos días!

Lo primero siento muchísimo teneros así de abandonados (sobre todo cuando solía escribir muy muy a menudo), pero está siendo un verano difícil por aquí (bueno, decir difícil se queda bastante corto) y casi no me queda tiempo de escribir. LO SIENTO!

Como podéis leer en el título, siiiiii, estoy a tan solo tres días de mi viaje a EEUU. Tan solo tres días, como pasa el tiempo... casi no puedo creerlo. Y en realidad no es que no pueda creerlo, es que no tengo ni siquiera tiempo de pensar en ello. Creo que aún no he asimilado que en tres días a estas horas estaré pisando Nueva York.

Desde mi último post, en el que os contaba la cita en la embajada, he seguido preparando cosas.
Hice el pago de la agencia, donde elegí ampliar la opción B del seguro médico (creo que la opción de ampliar el seguro médico solo te la da APIA, pero no estoy segura). Sobre ampliar o no el seguro médico hable con mi HF (os recuerdo que ella es psicóloga y el enfermero, por consiguiente conocen bastante la sanidad del país) y me dijeron que si no me gustaban los deportes de riesgo con ampliar la opción B era suficiente, y que era bueno hacerlo porque elimina el copago.
Aquí os dejo una tabla comparativa de todas la opciones, para que os hagáis una ligera idea de lo que hablo, =).


Por otra parte, el sábado pasado (una semana y un día antes del día de partida) me llegó la información de los vuelos (menuda ilusión me hizo). Recibí un correo de la agencia en el que me informaban de que los detalles de mi vuelo estaban disponibles en la web. Corrí "cual gamo" a conectarme a la web de APIA y efectivamente, allí aparecía la información. Despego el domingo día 14 de agosto, por la mañana, de Madrid, Barajas y aterrizo unas 8 horas y media después en Nueva York, JFK. Mi agencia te da la opción de ponerte en contacto con otras au pairs (no se si todas las agencias lo hacen) que vayan en tu mismo vuelo (si ellas quieren) y en mi caso he conocido a una chica majísima Bea, que da la casualidad que también tiene blog (aquí) y que será con quien comience mi aventura americana, =).

A parte de esto he hecho también el carnet de estudiante internacional (que aunque la agencia no te lo propone, he leído en otros blogs que está muy bien dado que hay bastantes descuentos con él en EEUU), que se solicita por internet y en unos días te lo envían a casa (eso si, previo pago del carnet y el recargo por enviarlo a casa, pero no asustarse, son sobre 10€ solo). Y también he ido a hacer el carnet de conducir internacional, fui a hacerlo a Cáceres (que en Plasencia, me cago en toda su estampita, no hay DGT) y ya que estaba aproveché el viaje para conocer a dos futuros au pairs que inician su aventura unas semanas más tarde que yo. Una es Alba, mi salvadora particular y sobre la que ya os he hablado en otras entradas (blog aquí) y el otro es Alex, un chico majisimo con el que también he tenido el placer de hablar (blog aquí).
Son un encanto, tomamos una cervecita (bueno Alex tomó cerveza, Alba y yo somos mas sanas, jajajajaja) y luego nos fuimos a comer al Fosters (comida americana para conocer a futuros compañeros de aventura en América). Pasamos toda la tarde juntos y sin cerrar el pico (se junto el hambre con las ganas de comer, lo que nos gusta hablar...) La verdad, me han caído muy muy muy muy bien (y se queda corto)... estoy deseando que nos veamos de nuevo (la siguiente vez al otro lado del charco). Aquí os dejo una foto para que los conozcáis... ;). Son un verdadero amor!



La cita del carnet de conducir internacional fue sin muchas novedades, exceptuando que entrando en Cáceres mi móvil decidió volverse loco y dejar de indicarme por donde debía seguir (gracias a que ya estaba al lado y una señora muy maja me indicó como llegar y donde aparcar) y que la chica de tráfico me riñó un poco (bastante) por llevar una foto demasiado grande (si, usé la foto de la embajada, que las tenía muertas de risa, aunque os aconsejo no hacerlo, no solo por evitar la charla, sino porque a mi estuvo a punto de rechazarmela, debí darle pena).

Durante este tiempo también he pensado y comprado los detalles para mi HF. Me ha costado bastante decidirme, sobre todo en el caso de los niños (la verdad es que aún no los conozco demasiado y es difícil acertar cuando no conoces lo suficiente a alguien).
Para los padres lo tuve claro desde el principio, quería algo típico de por aquí, por lo que decidí que les iba a llevar una botellita de aceite de oliva virgen extra Urdoliva (es la fábrica de aceite que hay en mi pueblo, siiiiiii, hago publicidad porque es una aceite muy muy buena y es de mi pueblo, =)) y un botecito de pimentón de la Vera (que sepan lo que son alimentos ricos ricos ricos, y de la zona, =)).
Para los niños me costó mas, pero al final decidí que les llevaría el juego del parchís y la oca y el dominó (que son los típicos juegos de mesa en España, y además es que a mi me encantan los juegos de mesa) y un libro de historias típicas en España, para leer antes de ir a dormir (si les apetece). Decidí no llevar regalos individuales porque luego las comparaciones son odiosas y no quiero empezar creando alguna discusión entre los niños, jajajaja.

A parte de todo esto, me dedico a prepararlo todo para mi partida, tengo la habitación de mi hermana (aprovecho que está trabajando fuera y uso su habitación) que parece un campo de batalla. Ropa por aquí, productos de aseo por allá, documentos por el otro lado, zapatos en el medio... es digno de ver (aunque no os la voy a enseñar, que me da vergüenza). Tengo una lista inmensa de cosas que me tengo que llevar y solo dos maletas (una para facturar y otra de cabina) y una mochila para llevarlo todo... ¿Lo conseguiré? El sábado por la mañana lo sabremos, que es cuando tengo intención de poner todo dentro de las dos maletas. ¿Es posible que me estrese más de lo que ya estoy? Si, muy probable, pero si lleno antes la maleta se que voy a estar dando vueltas a si puse tal o cual cosa, y donde lo puse exactamente, y como consecuencia voy a revolver todo y al final va a ser peor, así que paciencia no hay otra ciencia, y a esperar al sábado para ponerlo todo dentro de las maletas.

Por ahora es todo, me disculpo de nuevo por teneros abandonados, pero no puedo hacer más de lo que ya hago... Y espero que volváis a leerme pronto.

Un beso enorme!

P.D. Mi HD me manda de vez en cuando fotos de mis niños (que salados son) y me informa de como va todo por allí, además también está poniendo todo a punto para cuando yo llegué, está arreglando mi habitación (pista, es lila) y organizando todo (me envía también fotos de mi futura habitación). Que señor más encantador, =).